De los escarpados viñedos de la Axarquía malagueña, salen las uvas moscatel con las que Telmo Rodríguez elabora el que, probablemente, es el mejor vino dulce de España.
Elaborado con la tradición de las paseras, que dejaban secar las uvas al sol diez o quince días nada más ser recogidas. 20 meses de crianza en barricas de roble francés ennoblecen la frutalidad de este magnífico vino.
Muy perfumado, con una evolución magnífica en botella con un recorrido mínimo, según he podido constatar, de cinco años, el equilibrio entre acidez y dulzor es perfecto y su color amarillo intenso desborda aromas de gran delicadeza.
Telmo elabora también MR, una versión más joven y fresca, donde la uva cobra más protagonismo sin perder originalidad.