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Trilogía del frío (y 3). Ginebra. Suiza.

Ginebra es una ciudad global, centro financiero y mundial de la diplomacia y la ciudad del mundo que alberga más sedes de organismos internacionales ( Naciones Unidas, de la Cruz Roja…).
Tiene una población de 200.000 habitantes, que rozan el millón si abarcamos todo el área metropolitana.

En Ginebra se respira riqueza… se palpa en el ambiente. Especialmente, cuando cae la noche y se encienden la multitud de anuncios luminosos sobre los tejados de los edificios, las grandes firmas sobre todo de alta joyería y relojería (como no podía ser de otra manera) resaltan su importancia y recuerdan su presencia.

La ciudad está dividida en dos zonas. En una de ellas se encuentra el centro histórico, las tiendas, bancos etc.                                                                       En la otra, una larga retahíla de hoteles de gran lujo, Four Seasons, Woodward, Mandarin Oriental o Fairmont, entre otros con sus fantásticos restaurantes, y todos en una situación privilegiada frente al lago Lemán, el mayor de la Europa occidental,  ofreciendo una vista maravillosa de la ciudad.

 

 

Llegamos un sábado y la gente llenaba las calles, en clara oposición al domingo, en el que no es que no hubiera gente por la calle (el frío no ayudaba, pero el sábado también hacía frío), es que nos resulto difícil encontrar un restaurante abierto! Finalmente, la suerte nos acompañó y pudimos disfrutar de una estupenda founde de 4 quesos.

Ginebra, además de la ciudad en sí, nos ofrece muchos atractivos que hay que visitar, como la ya mencionada Sede de la ONU frente a la cual se encuentra la Silla Rota, escultura monumental de madera con una altura de 12 metros y que simboliza el rechazo a las minas antipersona y bombas racimo, el museo de la Cruz Roja, la famosa Fuente Jet d’Eau y su chorro de agua que lanza 500 litros de agua por segundo a 140 metros de altura, la Catedral de San Pedro de Ginebra, el Jardín Inglés y el Reloj de Flores, el Monumento Nacional…

Merece la pena (más bien la alegría!) visitar Ginebra en cualquier época del año y combinarla con otras ciudades cercanas como os vamos a proponer.

Bon voyage!

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