Hace unos años, Luis García de la Navarra dejaba su valorado y confortable trabajo como sumiller en Aldaba y se embarcaba en este proyecto, hoy consolidado como una de las mejores ofertas de Madrid. Los excelentes productos siempre de temporada, son tratados con sencillez, mimo y maestría.
Y con Luis al timón, tener una oferta de vinos atrevida y completa, era inevitable!
Hace unas semanas, y no sé se ya las veces, repetimos y, como siempre, la experiencia gastronómica fue fantástica.
Es un placer volver a ver a nuestro querido Luis, premio nacional de gastronomía al mejor sumiller en 2004 y a quien tenemos el honor de conocer desde hace muchos años y que ha tenido a bien transmitirle alguno de sus vastos conocimientos del vino a este humilde probador. Pero hasta esos conocimientos quedan empequeñecidos al lado de su calidad humana, que se le escapa en todo momento por su sonrisa
Nuestra última cena fue, una vez mas, excelente. Basada casi exclusivamente en verduras de temporada: cardo con trufa negra, alcachofas como mantequilla, tirabeques mucho mas que sabrosos, pimientos rojos con huevo frito y ajo, borrajas y judías verdes. Vamos, que hicieron honor a su apellido y nos trajeron la huerta navarra a nuestra mesa.
Y no faltaron las setas, delicadamente salteadas y en el punto perfecto para que todos sus sabores y aromas se apreciaran en todo su esplendor. Un atún delicioso supuso el remate perfecto.
Y a la hora de elegir los vinos… yo que soy mandón por naturaleza, cuando Luis está cerca, me callo. Solo diré que el Viñas del Cadastro de Olivier Riviére nos obligó a repetir para terminar con los quesos perfectamente seleccionados.
Recuerdo otra ocasión, en una cena con nuestros amigos Mónica, Fernando, Rocío y Eduardo, una maravillosa experiencia vinícola. Por primera vez probamos el soberbio vino que produce Xavier Ausás (ex enólogo de Vega Sicilia). Las 3 botellas que le habían llegado a Luis, cumplieron su misión de alimento para el alma en nuestra mesa.
El local es acogedor y agradable y el servicio cercano y profesional. Buenos capitanes suelen hacer buenos soldados…
Desde que no vivimos en Madrid, y de esto hace ya unos años, en nuestras frecuentes visitas a la capital por asuntos laborales y personales, procuramos conocer las nuevas ofertas gastronómicas, en continuo cambio, que la ciudad nos ofrece. Pero raro es el viaje en que no recalamos en una cena o comida, en García de la Navarra. Y, sin duda, lo seguiremos haciendo!
www.garciadelanavarra.com
